Ruth E. De León ¡Los centros educativos se respetan!
Es inaceptable que el alcalde, Francisco Peña, utilice espacios sagrados para la formación y el desarrollo de nuestros jóvenes, como lo son los centros educativos, para promover figuras vinculadas a contenidos que desmoralizan a la mujer y distorsionan el verdadero valor de la educación.
¿Hasta dónde vamos a permitir que la figura de la mujer sea utilizada como instrumento de burla o provocación dentro de nuestras instituciones? Presentar a una creadora de contenido para adultos que se hace llamar «Profezorra» en un espacio académico no solo es una falta de respeto a nuestras niñas, niños y adolescentes, sino también un golpe directo a la dignidad de todas las mujeres dominicanas.
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Este tipo de actos no pueden pasar desapercibidos ni normalizarse. Desde ya alzamos la voz para exigir responsabilidad y coherencia de nuestros funcionarios públicos. La escuela debe ser un lugar de inspiración, no un escenario para el espectáculo vulga
